Muchas ocasiones sin darnos cuenta, el cerebro ha elegido por nosotros a la hora de realizar una compra u organizar el dinero, creyendo que lo hacemos de forma adecuada. Y hoy hablaremos sobre como el cerebro contabiliza nuestros ahorros e inversiones de distintas maneras como la emocional, por alguna influencia o por los sentimientos. En resumen, nuestro cerebro toma las decisiones financieras por convicción.
De esta manera tratamos el dinero como algo fungible e independiente, el mismo dinero para la renta es el mismo que se gasta en comida o en divertirse por que éste no tiene reglas (entonces las emociones llegan). Como cuando salimos con amigos y gastamos en bebidas, comida y cine, por que es parte de la “diversión” y como es parte de la experiencia no se “sienten” los gastos por que los percibimos de distinta manera.
Si quieres dejar de malgastar dinero y ser víctima del “marketing” de las empresas, debes tener un pensamiento crítico para no dejarse distorsionar la percepción del dinero, anticipar gastos con un presupuesto y no actuar de forma deliberada, vigila los gastos y mantén un plan. Tómate el tiempo para decidir cómo utilizar el dinero y evita el impulso de comprar.
Sabemos que es una tendencia natural, pero toma en cuenta que al final es la manera de como administras tu dinero.